Barcelona, 20 de julio de 2020
DEBERES HECHOS
Con mucha dificultad, esfuerzo, ilusión y sin ninguna ayuda hasta el momento (después de 3 meses cerrados), el sector cultural ha ido abriendo sus puertas a la actividad cultural dirigida a la ciudadanía. Lo ha hecho cumpliendo todas las normas presentes en los protocolos acordados con el PROCICAT (existe un protocolo específico para cada disciplina artística). Disponemos de controles de aforo y registros deusuarios, tan necesarios como inexistentes en muchas otras actividades. Los resultados son abrumadores: ninguno de los 140 brotes activos en Cataluña tiene su origen en un acto cultural.
Este concluyente dato confirma la confianza que los espectadores depositan actualmente en la programación de actividades culturales, convirtiéndose en corresponsables del éxito logrado hasta la fecha, gracias a su asistencia y también a su actitud cívica. Todo ello nos hacía prever que más pronto que tarde el sector podía lograr una apertura del 100%.
PERPLEJIDAD
El “premio” a esta actuación responsable avalada por los resultados fue la decisión -primero en Lleida y después en Barcelona y área metropolitana- de aplicar un manual de instrucciones repleto de etapas superadas e inseguras, donde queda en evidencia el desbarajuste existente por parte de los máximos responsables encargados de ayudarnos a salir de la crisis. Esperábamos una fase 2 flexible, pero la realidad en estos momentos es que nos han cerrado la cultura.
INDIGNACIÓN
Todos los agentes del sector cultural se activan alrededor de la campaña CULTURASEGURA porque no es aceptable, ni cierto, ni justo, que se lance el mensaje a la ciudadanía de que la cultura es una actividad contagiosa y se nos prive de la viabilidad económica que podamos tener después de 4 meses de crisis. Playas abiertas, actividades abiertas, la calle abierta, las vacaciones a la vuelta de la esquina, y la única ocurrencia es cerrar los espacios seguros donde la gente lo pasa bien, disfruta, reflexiona, ríe y llora…, en condiciones de máximo control, higiene y distancia,
homologados por el propio PROCICAT.
Desproporcionalidad: ¿Cómo se puede cerrar un sector de actividad que representa casi un 4% del PIB directo, sin ningún argumento sólido ni causa justificada? ¿En base a qué derecho, a qué ley? ¿Quién responde de los daños causados?
COMPROMISOS
Ayer domingo, a las 9 de la mañana, después de largas negociaciones, llamadas y gestiones -que empezaron con el cierre de la comarca de El Segrià y se han intensificado con la resolución dictada el viernes- representantes de los cinco sectores culturales (música, editorial, artes escénicas, artes visuales y audiovisual), se reunieron con el Departament de Cultura y representantes del Departament de Salut y de Interior. Ante una falta de argumentos creíbles para decidir cerrar toda una actividad segura y dejar a muchas sin control al libre albedrío de la ciudadanía, los intervinientes asumimos estos compromisos:
• Por parte del sector, reiterar nuestra voluntad de ser parte de la solución, ofreciendo una gestión corresponsable en la gestión de la seguridad de los espacios. El virus estará con nosotros mucho tiempo y no se puede cerrar un país indefinidamente y mucho menos de manera intermitente, porque supone acabar con su salud anímica y económica. Por tanto, habrá que buscar espacios
de seguridad donde las personas puedan ocupar su tiempo libre.
• Por parte de la Secretaría de Salut y de Interior, gestionar con carácter urgente las peticiones de apertura de todas aquellas actividades culturales prohibidas en esta resolución, una vez enviada la pertinente documentación a los ayuntamientos para que sea validada por el PROCICAT. El sector preparó la documentación pero El Govern todavía no se ha pronunciado sobre las actividades culturales que ayer ya se celebraron, aumentando aún más su imagen de desbordamiento, descontrol, incoherencia e incapacidad para rectificar una norma totalmente equivocada, que ha hecho un mal irreparable a un sector ya de por sí muy damnificado.
RIDÍCULO
Ayer asistimos a un espectáculo político grotesco, que nos avergüenza a todos, fruto de un error de dimensiones increíbles, que no se corrige sino que se refuerza, y que provoca la siguiente situación:
• La norma PROHIBE la realización de actos culturales.
• Pero EXISTE UNA EXCEPCIÓN: si a través de los Ayuntamientos se pide permiso al PROCICAT, cabe la posibilidad de realizarlos. Nos dicen que esta opción, que creemos que estaba hecha a medida del Festival Grec, es la puerta que permitiría abrir la actividad cultural que aún no ha decidido anularse definitivamente. Resultado: a partir de ahora, si nadie no rectifica, habrá un alud de peticiones para hacer actividades culturales abiertas al público, desde Fiestas Mayores, hasta actividades en espacios cerrados. Y el PROCICAT las tiene que estudiar todas. Así hemos llegado a esta situación con actividades municipales realizándose sin permiso, incertidumbre hasta el último momento, descrédito del Govern, pelea y ruido político, público desinformado y desorientado, y todo un sector ESTIGMATIZADO, ARRUINADO e INDIGNADO.
DEMANDAS
El sector cultural ha demostrado con hechos una clara consciencia y reconocimiento de la difícil tarea que nuestros gobernantes han de afrontar en una gestión extremadamente complicada. Siempre ha estado a su lado con voluntad de ayudar y de sumar. Somos y queremos ser parte de la solución. Pero necesitamos contar con todo el apoyo por parte del Govern y del resto de administraciones. Por todo ello, PEDIMOS:
• Que se rectifique inmediatamente la decisión sobre el cierre de los espacios y actividades culturales, dado que estamos cumpliendo con todas las medidas adoptadas sin que se haya producido ningún caso de contagio. Por ello solicitamos que no se suspenda la actividad cultural segura propia del verano (Fiestas Mayores, etc).
• Que de ahora en adelante se escuche al sector en la gestión de las decisiones que le afectan tan directamente.
• Que la gestión de la crisis tenga fases de restricción es lógico, pero los espacios culturales, como espacios seguros que son, deben estar al final de las fases de cierre.
• Que la cultura sea considerada por el Govern como uno de los valores que ha ayudado a sobrellevar la crisis y se la trate con justicia (no se ha producido ningún homenaje desde el Govern ni desde ninguna otra administración, a los artistas que nos han consolado desinteresadamente, por cierto). LA CULTURA ES UN BIEN DE PRIMERA NECESIDAD.
• Que se generen campañas de confianza entre el público, tan deteriorada por las imprudentes declaraciones emitidas desde el Govern. Son demandas asumibles, justas y la rectificación honora a quien la ejerce especialmente cuando el error es tan flagrante. Aún así, el descrédito es tan grande que le ha sacado la categoría de estigma a la cultura y ahora quien la ostenta es el Departament de Salut. En caso de que se bunquerice la decisión y no se comprenda que estamos en una fase nueva, en la que muchas empresas de todos los sectores somos seguras y estamos preparadas para continuar abiertas conviviendo con la crisis, se hace absolutamente necesaria la dimisión de los responsables.
Para más información:
Camilo Tarrazón, presidente del Gremi de Cinemes de Catalunya
Isabel Vidal, presidenta de ADETCA
Carmen Zapata, gerente de ASACC
En representación de los diferentes sectores culturales
Comunicación: Laura Bertran – 660 49 07 08